Método
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Este texto podría resultar de difícil comprensión la primera vez que se lee. Explicar con palabras simples un método complejo no es fácil, por eso si tienes la intención de convertirte en nuestro estudiante y quieres entender nuestro método, por favor léelo tantas veces como lo necesites.
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Hay dos factores principales que repercuten en la memorización: la importancia que nuestro cerebro asocia a una palabra y la frecuencia con la que se usa.
Cuanto más importante es una palabra, más frecuentemente se utiliza y con mayor facilidad se memoriza.
Tomemos dos palabras japonesas: NEKO=GATO y MUKADE=ESCOLOPENDRA
En nuestra mente, GATO es un animal bien definido y por ello, en el momento en el que se aprende la palabra NEKO, el cerebro lo asocia fácilmente a la imagen de un gato, memorizando así la palabra con el concepto. Por otro lado, con ESCOLOPENDRA, no sabiendo muy bien de qué animal se trata, el cerebro tendrá mayor dificultad a asociar y memorizar la palabra MUKADE. Claramente, se pueden memorizar ambas palabras, pero con MUKADE se hará un esfuerzo mayor.
Esto es un ejemplo de una de las palabras más comunes, como puede ser GATO y una casi desconocida, como es ESCOLOPENDRA. Pero el principio es el mismo para todas las palabras. Nuestro cerebro es como un ordenador que debe acceder a las carpetas y archivos. Mientras que las carpetas, que están en la raíz superior, encuentran más fácilmente los archivos que contienen (palabras de uso frecuente), las sub carpetas, contienen los archivos remotos difíciles de alcanzar (palabras menos usadas). El cerebro codifica antes GATO que ESCOLOPENDRA, del mismo modo, un verbo frecuente como CAMINAR lo codifica antes que uno menos utilizado como ESCALAR. Para el cerebro, codificar el nombre de una calle por la que pasamos todos los días, es más fácil que codificar el de una calle por la que no pasamos desde hace muchos años.
El cerebro codifica una palabra en décimas/centésimas/milésimas de segundo. Cuanto más profundamente se encuentre la palabra en las sub carpetas (cuanto menos usada sea) más esfuerzo será necesario. Cuanto más difícil sea codificar una palabra, mayor será la dificultad para memorizarla en otro idioma. Y por ende, cuanto más esfuerzo sirva para aprender una palabra en otro idioma (en nuestro caso el japonés), más difícil será memorizar los kanji que la componen.
El otro y más importante factor para memorizar las palabras, es la frecuencia. Cuando se estudia una nueva palabra, el cerebro la codifica escuchándola, leyéndola, escribiéndola y pronunciándola. Cuanto más se refuerce la palabra, más fácil será memorizarla.
Tal y como hemos comentado arriba, para memorizar NEKO sirve menos esfuerzo que para MUKADE, porque la imagen de un gato está bien definida en comparación con escolopendra. Imaginemos que un estudiante aprende estas dos palabras, pero NEKO no la usa durante todo un año, mientras que MUKADE la usa todos los días. Después de un año, ¿cuál de estas dos palabras habrá memorizado mejor? ¿NEKO, palabra aprendida y nunca más usada (y probablemente olvidada) o MUKADE, palabra aprendida y usada todos los días del último año?
Cuanto más se usa una palabra, con más facilidad el cerebro la codificará y sobrescribirá (memorizará). Cuanto mejor se sobrescriba una palabra en japonés, con más facilidad se memorizarán los kanji que la componen. Y aunque a medio y largo plazo se puedan olvidar los kanji de una palabra bien memorizada, recordarlos después de repasarlos será más fácil en comparación con palabras que no se han memorizado bien.
La regla principal cuando se estudian los kanji, es memorizar un buen número de palabras con los respectivos kanji que las componen. Si olvidas las palabras, te costará mucho más trabajo memorizar los kanji y será mucho más probable que tu cerebro los cancele.
El método de KanjiGO da a cada kanji/palabra un valor numérico de un mínimo de 1 (para las palabras menos importantes) a un máximo de 5 (para las palabras más importantes). Cuanto mayor sea el valor de un kanji/palabra, más frecuentemente se mostrará durante el curso.
Un kanji/palabra de valor 5, se mostrará más veces que uno de valor 4 y mucho más que uno de valor 1.
Para simplificar, hemos hecho algunos ejemplos indicando los valores extremos de 5 y de 1, pero especificamos que hay también los valores intermedios de 2, 3 y 4.
EJEMPLO: Hay 100 palabras con un valor de 5 y otras 100 con un valor de 1. Si durante el curso estas palabras se muestran un total de 5000 veces, aparecerán 4400 veces las de valor 5 y 600 veces las de valor 1. Cada palabra de valor 5 se mostrará 44 veces, mientras que las de valor 1 se mostrarán solo 6 veces. De esta manera, las palabras de valor 5 (importantes) se memorizarán mejor que las de valor 1 (no tan importantes), porque aparecerán con una frecuencia diferente.
Hay palabras de valor 1 (no importantes o comunes), que se escriben con kanji de valor 5. En un caso así, la palabra tendrá el valor 1, pero aumentaremos su frecuencia como si tuviera un valor mayor, porque el objetivo no es sobrescribir en el cerebro del estudiante la palabra que vale 1 sino el kanji que vale 5.
Durante la realización del curso hemos tenido en cuenta también las palabras que se deben saber para superar con éxito el JLPT. Los kanji/palabras del N5/N4/N3 con un valor alto (valor 5 y 4) aparecerán con mayor frecuencia que las palabras/kanji del mismo valor que aparecen en el N2/N1. Esto es así porque si se olvida un kanji del N1 no es tan grave como olvidar un kanji del N5 o del N4.
Esta es solo una parte del sistema con el que hemos creado KanjiGO. Hemos explicado a grandes rasgos algunas de las reglas fundamentales de la frecuencia, pero el algoritmo que hemos realizado es mucho más complejo y articulado.
Cada kanji tiene una Ficha Lección y una Ficha Examen. Y después de un determinado número de kanji hay un examen de comprensión auditiva. Cada Ficha Lección está compuesta por dos bloques. En el primero se encuentran las palabras que contienen los kanji que se están estudiando y en el segundo se repasan las palabras aprendidas en las lecciones anteriores. En las fichas de los exámenes hay ejercicios de comprensión escrita y auditiva con puntuación final. Según el resultado del examen, el estudiante podrá evaluar si avanzar con el estudio de los kanji sucesivos o si le conviene dedicar ese tiempo a repasar los kanji anteriores. Los exámenes son fundamentales para evaluar los progresos del estudio. De los propios errores se puede entender qué kanji es necesario repasar.
Un número tan elevado de Fichas Lección y Examen, permite al estudiante leer las palabras continuamente (y los kanji que las constituyen). En KanjiGO, cada kanji/palabra se ha puesto en un determinado punto siguiendo un algoritmo matemático de frecuencia con el objetivo de mejorar las posibilidades de la memorización.
Crear un curso con 2100 kanji, más de 15 mil palabras con valores de frecuencia, miles de exámenes de comprensión escrita y auditiva con puntuación final, con un total de más de 6500 fichas, no ha sido fácil. Por esto podemos confirmar que nuestro curso no es una simple lista de kanji y palabras. Hemos trabajado más de cuatro años para realizarlo y sabemos que hemos creado un producto único para el aprendizaje de los kanji.
Esperamos que esta breve explicación, aunque sea compleja, te haya ayudado a comprender cómo está estructurado nuestro método de estudio.

¡Estudiar los kanji con nuestro método es posible para todos!
Más de 35000 estudiantes de todo el mundo nos han elegido. ¡Gracias!